Mi fin de semana.

Tuve un fin de semana muy extraño, a continuación relato como sucedieron los hechos. No pretendo que me crean, pero sí que tomen en consideración que ustedes también pueden correr con la misma suerte. Cambie los nombres para no ser obvio, si alguno de ustedes se siente identificado es mera coincidencia.

Viernes

Después del paseo en bicicleta decidimos ir a cenar sushi, en esta ocasión fuimos Tulio, Alfredo, Josse y yo. Por alguna extraña razón, nos sentamos afuera. Eran las 11:00 pm y el clima estaba a 39^OC. No busque la humedad en mi teléfono inteligente, pero haciendo uso de la estadística descriptiva, un poco de azar, y experiencia previa, estimo que el porcentaje de humedad era del 46.9087%, suficiente para sentirse muchísimo más que incómodo. En fin, cada quien pidió un platillo, y un tarro de cerveza, decidimos olvidarnos del calor, que para ser sinceros, jamos lo olvide, nunca, siempre estuvo presente, molestando estorbando, jodiendo, burlándose de mí, como lo hace todos los años en esta temporada del año.

Tocamos diversos temas, como las chichis de Kate Upton, los ojos de Kate Upton, hablamos un poco sobre los paseos en bici en nuestra ciudad, y un poco más de la boca de Kate Upton. Recuerdo que Josse, hablo de algo más, seguramente menciono a Kate Upton. Justo estábamos terminando el último bocado de nuestro sushi, cuando a Tulio, Alfredo y a mí nos llegó el mismo mensaje de Edu. Decía algo así:

 “K-y-ganLE, eStoY en uN PartY bien LoK, yeNo de MuGeRes EXOTICAs, mOxxXXAS, y muy Fogosas =P, if u KnuUUU waD Ai MiNNNNnNNn, no traigan a Josse.”

Tulio y yo nos quedamos viendo extrañados, porque hablo en inglés, nunca lo hace. Alfredo, guardo su celular y de inmediato pidió la cuenta. No sabía qué hacer, no podíamos comentar nada en la mesa. Alfredo pago su parte y se retiró, excusándose que estaba muy cansado y que se tenía que dormir. Josse, lo miro extrañada pero cedió. Tulio y yo pagamos la cuenta, en el estacionamiento, nos pusimos de acuerdo, y aceptamos ir un rato a la fiesta a la cual nos había invitado Edu.

Al llegar, al lugar, se respiraba un ambiente exótico, olía a que habían fumado tabaco de sabores, de frambuesa azul, para ser más exactos, 23.86 gramos aún más exactos. Se escuchaba una música que yo podría describir como polka, pero jamás he escuchado polka entonces no me crean mucho. También se escuchaba en la melodía, una gaita irlandesa, y de vez en cuando los triángulos esos que utilizan los coros infantiles de las misas católicas los domingos. Una cortina separaba, lo que al parecer era donde se estaba llevando a cabo la fiesta. Al cruzarla, nos encontramos con una sorpresa.

En efecto había mujeres hermosas y de muy buen ver. En total había cinco mujeres en la habitación, las describo a continuación.

1.       La primera que me llamo la atención, fue una dama, de alrededor de 23 años de edad, de 1.83 m, y 52 kg (la cargue, adelante cuento esta parte). Tez morena, o marrón, o marrón con café, una combinación muy exótica, pero unos ojos enormes de color verde aceituna. Muy bien distribuida.

2.       La segunda dama que alcance a ver fue a Gabourey Sidibe, si la actriz que le dio vida a Precious.

3.       La tercera mujer tenía el pelo rubio, ojos azules, podríamos clasificarla como voluptuosa, además de que llevaba un escote, muy provocador, muy blanca, 1.78 cm, y 58 kg.

4.       En cuarto lugar estaba una chica, con los ojos rasgados, oscuros, no sé si eran negros o cafés, pelo castaño, muy delgadita, Tulio seguro la describió en su mente como Petite, pero todo muy bien puesto en su lugar. 1.85cm, 49 kg.

5.       La quinta mujer, tenía un busto grande, caderona, tez morena, 1.58 cm, y 62 kg. Pelo oscuro, muy bonita sonrisa.

Pero la verdad eso no fue lo que nos sorprendió, si no que retirados de estas bellezas, estaba Edu, y un amigo, que su por su sola apariencia, podría juzgarlo de homosexual, pero sé que está mal hacer juicios.

En ese momento, le dije a Tulio, que se fuera sirviendo un trago y tratara de romper el hielo, mientras yo con mi habilidad de pensamiento lógico matemático nuclear, desarrollaría un juego ameno, en el cual pudiéramos participar los 7, y garantizara horas de diversión, con los pocos elementos que vi en la sala: una colección de campanitas, una bolsa de doritos, y un cenicero. Fueron necesarios unos pocos cálculos cuando ya estaba el juego bien preparado, y grite, “¡porque no jugamos a construir tablas jacobianas!”

En ese momento hubo silencio en la sala, Edu y su amigo seguían bailando sensualmente uno enfrente del otro, incluso creo que uno lo estaba sujetando por el cinturón al otro, pero no me crean esta parte, quizá solo estoy siendo juicioso, y me estaba creyendo todo eso de lo homosexual. En fin, Tulio noto la tensión, y culmino mi juego con “!!NAKED!!”. Todas gritaron que sí. Se me acerco Tulio sigilosamente, y me dijo explícame el juego cabron, se lo explique, cambio un par de palabras al explicárselo a las chicas y al final agrego que tenían que quitarse la ropa cuando nosotros les dijéramos. Estaban más que ansiosas por iniciar el juego.

Y así fue. Fueron creo 2 horas o un poco más de pura diversión, las chicas estaban prácticamente en pelotas, Tulio, estaba besándose con Gabourey Sidibe, en el sillón, y yo tenía a las otras cuatro, ya listas para hacer… cuando de repente, llegan tres amigas, Laura, Dani y Vane. “NO MAMES” grita Tulio, voltee a ver rápidamente a Edu, quien en ese momento se estaba besando con el exótico bailarín, que parecía homosexual desde el principio. Se abrió un portal extraterrestre, que llevaba a un planeta en la galaxia z, a casi 123.89X10¹² años luz de distancia del planeta tierra, del cual salieron tres alienígenas. Me ofrecieron 7 mil dólares por el juego que había inventado. Lo acepte, se los escribí en una servilleta, se llevaron lo que quedaba de la bolsa de doritos, le gritaron joto al Edu, y se regresaron por el portal extraño que ellos mismos habían abierto.

Fue así como termino la noche del viernes.

Sábado

El sábado realice mis actividades habituales, y a media tarde quedamos en vernos en la casa de Alfredo y Josse, los mismos de siempre, Edu, Tulio, Melany y yo. Parecía que sería una de las tardes normales, en las cuales pediríamos sándwiches de la sandwichería, compraríamos cerveza 662, y veríamos alguna película que compramos a través de Lekker. Previamente, acordamos, todos, no hablar ni tocar el tema del beso de Edu, con el extraño bailarín.

Hicimos el pedido, entonces saque mi billetera para poner mi parte del dinero, cuando me di cuenta que aun traía mis siete mil dólares. Note que el fajo, tenia algo que sujetaba el dinero, algo así como un sim Telcel. Lo presione sin querer y en ese momento me volví un ente, invisible, sinsabor, no escuchable que solo era testigo de todo lo que sucedía alrededor. Empezaron a suceder cosas muy extrañas. Alfredo y Josse, empezaron a discutir, y se salieron al patio a hacerlo. A Melany, le dieron ganas de ir al baño, pero nunca lo hace en la casa de Alfredo y Josse, y como vive cerca fue hacer de las suyas a su casa. Edu y Tulio, notaron que se habían quedado solos, y decidieron hablarle a unas escorts, de una tarjeta que había recogido el día de ayer Tulio. En menos de cinco minutos las escorts ya estaban en la puerta de la casa, mientras seguían discutiendo los novios, Melany haciendo del dos en su casa y yo como un holograma perdido en el tiempo y espacios de la geometría euclidiana.

Edu, nada tonto, lo primero que hizo fue revisar si realmente las escorts eran mujeres, entonces inspecciono a cada una, metiendo su mano, y buscando entre su ropa interior, cualquier cosa que pudiera parecer un pene. Después de menos de un minuto, dio visto bueno, y tanto él, como Tulio, empezaron a disfrutar del manejar de mujeres que tenían a su disposición. Después de unos pocos minutos de agasajo, las mujeres estaban solo en sus calzoncitos. Tulio, emocionado, le baje el calzón a su escort, y se encuentra con la sorpresa de que no era ella, si no el. Enfurecido, confundido, y un poco alborotado grita “A no mames EDU.” Edu, hace lo mismo con la suya, y se encuentra con la misma sorpresa y comienza a gritar con la boca bien abierta “Ah!” El transexual, no la piensa dos veces y aprovecha que Edu, tiene la boca bien abierta para insertar su pene en la boca de Edu, y en menos de 10 segundos, hace una descarga de semen, de tal magnitud, incapaz de sostenerla para el cuerpo de Edu, a tal grade que este explota en 19 pedazos, y se hace un cochinero en la sala. En ese entonces entran Alfredo y Josse, del patio, y se dan cuenta del cochinero, lo cual hace enfurecer a Josse, y los corre a todo. Los transexuales salen corriendo, y al mismo tiempo entra Melany, quien se da cuenta de todo lo sucedido. La realidad para Melany fue demasiado, su mente fue incapaz de procesar la información a tal grado que ella también exploto. Tulio recoge los 19 pedazos de Edu, y la tanguita de Melany, y se retira antes de que Josse diga otra cosa. Tulio lleva los restos de Edu al hospital, y un doctor con vasta experiencia en problemas de disfunción eréctil reconstruye a Edu, en una operación que duro 6 horas. Sé que hoy lunes lo dieron de alta. Tulio, después de dejar a Edu al hospital se fue a su casa, y su mama le puso una chinga, ya que le descubrió la tanga de Melany, argumentando que su hijo usaba ropa interior femenina.

Yo volví a presionar el sim que tenían mis 7 mil dólares y regrese a mi casa a las 11:30 pm, para comerme un cereal y dormirme.

Domingo

El domingo fue un día muy normal, me levante temprano, fui al mercado del mar, compre algunos víveres, fui a misa con mi familia a las 9:30. A las 11:17 am comenzó a preparar los alimentos. Llegaron mis primos, comimos los siguientes alimentos

Ceviche de pescado

Aguachile de camarón

Arroz marinero

Callos Gigantes en coctel

Abulón Especial

Pasta con camarón

Pescado Sarandeado

Machaca de Marlín

Jugo con carne de Cahuamanta

Tenacitas de cangrejo

Langosta a la mantequilla

Taquitos de frijol

Después de comer, jugamos rummikub, y me dormí a las 9 pm, hasta esa hora no habían dado de alta a Edu, pero ya estaba en una cuarto, fuera de peligros. Soñé con mi amor de verano del 2002.